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domingo, 14 de septiembre de 2008

> 2 años sin lopez

A dos años del secuestro:
Aparición con vida de Julio López

Cuando Julio López fue secuestrado en La Plata, las pasadas fantasmales imágenes del régimen dictatorial de Videla, Massera, Camps y otros ge-nocidas se hicieron presentes y reales. Fue el primer secuestro desde la llegada de la democracia. Desde ese momento el compañero López, testigo clave en el juicio a Etchecolaz, se sumó a la lista de los 30 mil desaparecidos. Una oleada de repudio y bronca recorrió el país, en medio de una indignación que se mantiene. ¿Por qué lo hicieron? El secuestro fue para intentar amedrentar a otros testigos en los juicios contra genocidas que recorren los estrados judiciales. No se trató del inicio del retorno de un régimen genocida, ya que los militares no tienen espacio político para llegar al poder. más bien están cercados por el repudio de la gran mayoría de la población que no olvida ni perdona. ¿Y qué hizo el gobierno? Los Kirchner, que se presentan como defensores de los derechos humanos, ofrecieron recompensas por información sobre el secuestro, hicieron publicar fotos en documentos y organismos estatales y expresaron su pesar por lo ocurrido. Sin embargo, en un accionar común con organismos que otrora fueron consecuentes defensores de los derechos humanos, se quedaron sólo en esas medidas, necesarias pero totalmente insuficientes. El ex ministro de Seguridad bonaerense León Arslanián ya empezó a preparar el terreno político para que las autoridades dejen de hacer lo poco que están haciendo, al afirmar que Julio «está muerto».¿Y qué hace la justicia? En vez de invetigar en serio buscaría el testimonio de compañeros del entorno de López. El resultado es que pasaron dos años y no hay ningún indicio del compañero. El problema de fondo es que más allá de los juicios, logrados por la movilización popular sostenida durante décadas, el poder político no movió un dedo para depurar las fuerzas armadas ni la policía, que siguen siendo cuevas de represores y corruptos. Incluso al que “se castiga”, como a Bussi, se lo “pena” en un country. Y no es el único caso de ataque a los sectores populares: nuestro compañero Lázaro Duarte fue asesinado por una patota en Neuquén, hubo represión a los trabajadores del Casino, sigue la judicialización de las protestas y otros hechos lamentables y preocupantes. Frente a esta realidad, la movilización unitaria es la mejor herramienta para exigir que se investigue de verdad y se castigue a los culpables. El 18 de septiembre el Encuentro Memoria, Verdad y Justicia, que nuclea a más de trescientas organizaciones sociales, políticas y de derechos humanos, convoca a movilizarse. Tenemos que acudir al llamado. Tiene que ser una jornada de lucha por la aparición con vida de Julio López, por el castigo a los asesinos de Lázaro, contra la represión y la impunidad.En Buenos Aires, La Plata y en cada plaza central del país tenemos que marchar unitaria y masivamente, los trabajadores y el pueblo, los estudiantes, las organizaciones sociales, políticas y sindicales y los organismos de derechos humanos que sigan impulsando la movilización. Los días previos hay que llenar las facultades y colegios de carteles y realizar todas las iniciativas posibles repudiando el secuestro y exigiéndole al gobierno la aparición con vida ya de Julio López. Vení e invitá a tu familia, compañeros de trabajo o estudio. Cuantos más seamos, más fuerte será la voz de protesta y el golpe a la impunidad. Te invitamos a marchar con las columnas del MST.

lunes, 1 de septiembre de 2008

> VI Congreso nacional del MST




El mejor comienzo


El viernes 15 de agosto, la enorme y solemne Aula Magna de la Facultad de Medicina de la UBA desbordó de invitados de distintas organizaciones sociales y políticas, de delegados del MST de todo el país, de militantes, de integrantes del Teresa Vive, de jóvenes, amigos y simpatizantes del partido de Capital y Gran Buenos Aires.
Previendo una importante concurrencia, una pantalla gigante ubicada en el hall sirvió para que siguieran las alternativas del evento quienes no pudieron ingresar al Aula Magna. Pequeñas banderas rojas flameando, otras más grandes identificando a cada regional presente, las gigantografías con la presentación del Congreso y el rostro de Lázaro, las pancartas de los obreros del Frigorífico Lidercar en defensa de su fuente de trabajo, la bandera argentina identificando a trabajadores del supermercado Wall-Mart, la batucada de la Juventud Socialista y las consignas combativas entonadas, le pusieron al acto color, fuerza y emotividad. A la bienvenida por parte de los locutores le siguió la lectura de algunos de los tantos saludos recibidos y la mención de dirigentes sindicales, políticos y personalidades presentes. Por ejemplo, la de Héctor “Cacho” Bidonde, de integrantes del espacio de la Nueva Izquierda , como “Orly” Mattolini, Reynaldo Saccone y el “Negro” Robles; de Darío Perillo, Secretario de Organización del Suteba y dirigente de la Corriente Clasista y Combativa, de Ricardo Fierro, Manuel Campos Janeiro, Guillermo Caporaletti y Martín Bustamante, de la dirección del PCR, de Juan Carlos Beica de Convergencia Socialista, de Daniel Campos y otros representantes de Izquierda de los Trabajadores. Entre otros, hicieron llegar su saludo Gumersindo Parajón, de Pueblo Unido, Tucumán; Mario Cafiero, de Soberanía Popular y estuvo presente Manuel Lemos, de la Federación Agraria Argentina. La CTA de Buenos Aires, a través de Carlos Guanciaroso, Secretario Gremial de La Plata-Ensenada y Secretario General de la Agrupación Mosconi y Argentino Pinto, Secretario de Acción Social de la Agrupación Mosconi , como ex ypefianos en lucha, hicieron llegar la denuncia del ataque sufrido por el compañero Nahuel Pino de la Secretaría de Pueblos Originarios. Y recibimos el saludo especial de nuestra compañera legisladora porteña, Patricia Walsh, que al momento del acto se encontraba viajando al Encuentro Nacional de Mujeres en la Provincia de Neuquén. Con el acto instalado, puño en alto, subieron al escenario las delegaciones internacionales y los oradores. De Venezuela: Gonzalo Gómez, Víctor Guerrero, trabajador de SIDOR, dirigente de Alianza Sindical donde hace vida Marea Socialista; Jesús Varga, asesor de la UNT-Carabobo; Abelardo Sandoval y Arnaldo Campos, dirigentes del Sindicato de Automotrices-Valencia; Ismael Hernández, Coordinador de la UNT-Carabobo; William Porrás, Comisión Directiva del Sindicato de Educadores-Valencia; Consuelo Ramírez, Junta Ejecutiva del Sindicato de Eléctricos-Táchira y Federico Fuentes, colaborador de Marea Socialista. Más tarde llegó al país Vilma Vivas, Coordinadora General de la UNT-Táchira. Imposibilitado de salir de su país al ser procesado por la justicia venezolana por encabezar una lucha, nos hizo llegar su saludo Stalin Pérez Borges, Coordinador Nacional de la UNT y dirigente de Marea Socialista. Luego subieron al palco Pedro Fuentes y Rodolfo Mohr, dirigente de la Juventud del MES en el PSOL. También ocupó un lugar otra presencia que nos llena de orgullo, la de Celia Hart, hija de protagonistas del nacimiento de la Cuba revolucionaria y compañera de lucha. La presencia internacional en el país se completó con Vladimir Susanj, Secretario General del Sindicato de los Archivos, miembro de la Dirección Nacional de la CGT de la Cultura y miembro de la conducción de La Commune de Francia. Marcelo Parrilli, respetado luchador por los derechos humanos; Néstor Segovia, luchador del Subte perseguido por la patronal y la burocracia por defender a sus compañeros de trabajo, y nuestra querida compañera Vilma Ripoll fueron los últimos en ocupar su lugar en el escenario, antes de dar inicio a las alocuciones. A los oradores, cuyo extracto de los discursos publicamos en estas páginas, siguió el momento más emotivo del Acto: el homenaje a nuestro querido Lázaro (página 12). Con emoción, el recuerdo del “Viejo” en nuestro corazón y los puños en alto entonamos nuestro himno, La Internacional, tras lo cual dimos por terminado el acto. En las postrimerías, entonamos consignas recordando a nuestro dirigente histórico, Nahuel Moreno y nos fuimos, saludando a los obreros de Lidercar y aportando a su fondo de huelga. Fue un acto internacionalista, socialista y de lucha, un marco excepcional para abrir nuestras deliberaciones del VI Congreso.
 
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